El Quinario

 A L\G\D\G\A\D\U\ 

Libertad, igualdad y fraternidad

El Quinario

He creído necesario complementar la lectura de este trazado con una columna armónica; la existencia terrenal consta de cuatro tiempos –nacimiento, desarrollo, procreación y muerte- con variaciones dadas por el entorno cultural y de forma imperturbable el quinario, marca el ritmo, una caja orquestal o tambor en el trazado musical. Solo una obra coincide con esta visión,” El bolero de Ravel” que consta de cuatro tiempos dentro de un compás; si son cuatro tiempos ¿Qué tiene que ver con el quinario?, no es por su interpretación sino que comienza en un susurro, casi imperceptible y conforme se va desarrollando la obra se vuelve mas rápida, estridente, molesta para algunos y así veo yo el recorrido del C\M\ con poco en su recepción, puede llegar hasta … donde quiera.

Hablar del Quinario es hablar también del concepto Trinario o Trinidad porque al igual que esta, está ligada el número tres, el Quinario lo está al cinco y los dos conceptos están irremisiblemente destinados a la unidad.

Para empezar, la definición del Quinario tiene tres acepciones dentro de la RAE:

1.- Compuesto de cinco elementos, unidades o guarismos.

2.- Moneda romana de plata, que valía cinco ases o medio denario.

3.- Espacio de cinco días que se dedican a la devoción y culto de Dios o sus santos, muy común en la semana santa cristiana romana.

Así mismo, es un sistema de numeración -muy común en la antigüedad- de base cinco, usando los dígitos 0,1,2,3,4 para representar cualquier número, por ejemplo, el 5 se escribe como 10, el número 25 como 100 y el sesenta como 220. Dejo a la curiosidad de cada uno de los presentes el entendimiento de tal sistema. En el siglo XX solo algunas aldeas del África profunda lo seguían utilizando.

Es posible de forma errónea unir el Quinario al número 15 por similitud lingüística, el sistema de numeración en base quince aparece en algunos documentos como Quindenario o pentadecimal.

 Trazar este tema desde mi perspectiva es básicamente un tratado académico, y espero poder aportar algo personal en él, en el paso de la palabra con los diversos comentarios de los HH\ y HHnas\, sabré ha sido satisfecho este interés.

El Quinario está presente en todas las formas de pensamiento, sea iniciático o no, desde los eones de los tiempos la Cábala, el Hermetismo, la Alquimia, el Tarot, las sociedades secretas y/o discretas incluso las diversas religiones actuales lo tienen muy presente, por lo tanto, voy a intentar realizar un pequeño “religare” de conceptos.

El número cinco, está representado por el Hierofante o Sumo Sacerdote, según el tarot de Marsella –posiblemente el más conocido- y dice que representa el conformismo y la ortodoxia. En su posición normal: ceremonias, humildad, bondad, amabilidad, servidumbre, timidez, esclavitud a las propias ideas y en posición invertida: exceso de amabilidad, susceptibilidad, etc...

Hablo del Tarot siempre como herramienta de autoconocimiento y no como medio de adivinación y farándula.

En la versión del tarot masónico de Patricio Díaz Silva la carta cinco indica madurez espiritual, sabiduría y bondad. Patriarca que aconseja y protege a los demás. Se asocia con el aire y simboliza con la espada. Su proyección vital son los pensamientos transcendentes.

 

El M\V\ está entre las dos columnas del templo. Se apoya sobre un báculo con el águila bicéfala y su brazo derecho forma la escuadra, en la mano derecha el compás. Los tres rayos que provienen del G\A\D\U\ simbolizan la penetración de la potencia creadora través del mundo divino, del mundo intelectual y del mundo físico para producir todas las manifestaciones de la vida universal.

La columna de la derecha simboliza: la Ley y la de la izquierda: la esencia del ser, la libertad de obedecer y desobedecer.

El M\V\ está cubierto y tiene delante de él un libro en blanco.

La misma idea del esoterismo, de enseñanza secreta reaparece; más la instrucción es ahora “práctica y oral” no hay necesidad de libros.

Es la quinta letra hebraica (HE)  ה, en el Tarot de los Bohemios, Papus dice:

La hé expresa, jeroglíficamente, la respiración, el aliento. Es por la respiración que se crea y se mantiene la vida, razón por la cual se atribuye a la hé "todo aquello que anima". Mas la vida especializa al individuo diferenciándolo de sus semejantes; de aquí la idea de "ser" atribuida a esta letra. Pero la acción de la vida no se detiene aquí; es también el principio que enlaza el cuerpo material al espíritu divino, del mismo modo el hombre enlaza a Dios con la naturaleza. La vida es como para el hombre (aleph) lo que el hombre es para el Universo, el principio mediador por excelencia. De aquí todas las ideas de "lazo", de reunión de los opuestos, de religión, atribuidos a la hé. Esta letra es simple; corresponde astronómicamente al signo ígneo del carnero

Al comparar las tres explicaciones se nota la similitud de las interpretaciones.

Creo que todos recordamos al Dr. Giménez del Oso, posiblemente el primer contacto que muchos tuvimos con este mundo paralelo, en marzo de 1989 salió el nº 1 de la revista Más Allá, de la cual era director, extraigo unos párrafos del reportaje “La magia de los números”:

El número cinco es el “conflicto”, su aparición indica que las cosas se complican y que de la misma complicación nacerá la solución. Indica igualmente que hay errores que deben ser rectificados; que hay deseos que deben ser sacrificados para poder proseguir con el programa de la persona. Su mensaje podría leerse así: busca el error y al rectificarlo la vida volverá a cobrar valor.

Para Druidas y Esenios el quinario o cinco representaba: inteligencia, fuerza, vida, generación y naturaleza, estas cualidades se reflejan en cada ser humano.

Después de que Pitágoras introdujera este símbolo en sus enseñanzas –antes de ser admitido como estudiante en la escuela pitagórica se debían pasar cinco años en silencio, solo escuchar- los cristianos primitivos lo usaron como emblema de las cinco llagas de Cristo en la crucifixión y su inscripción es bajo la representación del cuerpo humano.

 

Veamos a continuación algunas representaciones del número 5 en cualquier ámbito del pensamiento:

 

  • En la Biblia, el número cinco aparece 318 veces.
  • Las columnas del atrio exterior del Tabernáculo eran de cinco codos de altura, separados por cinco codos de espacio.
  • El cinco, ocupa un lugar preponderante dentro de la tradición judía. La Torá, está compuesta por cinco libros: -Génesis, Éxodo, Levítico, Número y Deuteronomio-
  • Cinco fueron los estigmas que recibió Jesús en la cruz.
  • Para la fe musulmana, son cinco sus obligaciones principales –profesión de fe, oración, limosna, ayuno y peregrinación a la Meca. - y cinco son las veces que hay que rezar dentro del día.
  • En la Pancha o Mahabhuta, o “Los Cinco Grandes Elementos” del Hinduismo son: Tierra, Agua, Fuego, Aire y Éter.
  • Los cuatro fundamentos junto con la quinta esencia forman los cinco tatvas o bhutas, los cinco elementos principales Éter, el espacio, principio que da forma y sentido a la vida. Aire-viento, el principio de la vibración, movimiento y locomoción. Todo está en continuo movimiento. El Fuego, principio de expansión, vehículo de la luz y el calor. Las Aguas, principio de solución, el gusto, y la reproducción.  Tierra, el principio de cohesión y solidez.
  • Cinco piedras lisas fueron escogidas por David cuando el encuentro del gigante enemigo de Israel.
  • Es en el pentágono, de donde se deriva la estrella de cinco puntas., en ella se inscribe la figura humana con brazos extendidos y piernas separadas. Es la cruz, con sus cuatro brazos más la intersección (la rosa).
  • En música es el pentagrama, sustrato del sonido original que produjo la creación, y la nota Sol.
  • El polígono de cinco lados recibe el nombre de pentágono. El pentágono regular tiene algunas propiedades curiosas como ser que la resultante entre la longitud de su diagonal y la longitud de su lado es el número áureo.
  • La representación romana del cinco está dada por la letra –V- la cual resulta ser la letra veintitrés del alfabeto, el cual descompuesto, según la técnica de la numerología, es decir 2 + 3 = 5, nuestro número cuyo significado en esa ciencia  es la unión de lo femenino (2) con lo masculino (3), está a la mitad del camino (1, 2, 3, 4, 6, 7, 8, 9) y es la mitad del número perfecto, el 10, Dispuestos sobre la plancha de trazar, el número 5 aparece en el centro del todo delimitado por el cuadrado que lo obliga a ser soporte del universo y la masonería.
  • Cinco son los puntos propios entre masones y que los permite distinguirse entre los profanos y en su momento se sabrán.

 

En estas afirmaciones ya ha salido la masonería junto al quinario, existen muchas más y como siempre lo dejo a la curiosidad de los presentes, aunque pongo una más:

 

  • En matemáticas el cinco es el tercer número primo, después del tres y antes del siete.

Fijémonos ahora en la formación de la logia comparándolo esta afirmación:

TRES francmasones forman una logia SIMPLE

CINCO francmasones hacen una logia JUSTA

SIETE francmasones la hacen PERFECTA

Como símbolo masónico se encuadra en el roll de estrella quinaria en representación de la Paz y el Amor Fraternal, tomando como base la forma como se encuentra entrelazada.

No se debe confundir con la Estrella Flamígera, ni con el sello de Salomón.

Al mismo tiempo es representativa del cuerpo humano, están marcadas las cinco extremidades del hombre: cabeza, dos brazos y dos piernas; los cinco sentidos: vista, oído, olfato tacto y gusto; los 5 elementos naturales de los seres animados: La Materia, La conciencia o Alma, La inconciencia o Espíritu, la Fuerza y La Vida; por último, en el cuerpo humano se concentran los cinco elementos impuestos por la naturaleza para perpetuar su acción en el mundo: Tierra, Agua, Aire, Fuego y Tiempo.

 

En masonería el Quinario o cinco es el número del C\M\ por todo lo que representan uno y otro, me he releído el Manual del C\M\ para este trazado y el cinco está presente en todo el ritual:

§  En la apertura de los trabajos en logia regular el M\V\ hace CINCO preguntas

§  La edad del C\ es de CINCO años

§  Los golpes misteriosos son CINCO

§  Batería de grado son los CINCO golpes misteriosos

§  En su recepción CINCO son los viajes que realiza el recipiendario, en representación de los cinco años del C\M\ y su aprendizaje en el trabajo al mismo nivel del resto de HH\ y HHnas\ MM\

§  Hay CINCO signos: el vocal, el gutural, el pectoral, el manual y el pedestre.

Para el C\M\ es igualmente importante la letra “G”, leemos en la instrucción de grado:

  • ¿Por qué os hicisteis recibir Compañero?
  • Para conocer la letra” G”, M\V\

Durante el trazado de esta plancha ha llamado mi atención dos importantes conceptos, siempre según mi perspectiva y capacidad:

1º El número cinco y la letra “G” tienen un origen común o similar, no he encontrado una palabra que exprese mejor mi idea. Los números que usamos en la actualidad son de origen arábigo y estos tienen una particularidad y es que tienen tantos ángulos como el número que representan y exactamente igual le pasa a la letra “G” y el número de ángulos que tiene, también son CINCO, por lo tanto, su representación simbólica debe ser similar.


Ángulos/Valor:

1           2              3             4              5             6   

Aunque con algunos fallos de intersección creo que se entiende el concepto.

2º El cinco está en el punto medio del sistema decimal 0,1,2,3,4     6,7,8,9,10 representa el punto de equilibrio, el lugar del conflicto, del error para poder corregirlo, al mismo tiempo pienso en lo que decimos los francmasones: somos el punto en el centro del círculo y ahora visualizo la piedra cúbica en punta el símbolo del compañero visto desde arriba. Os pido que lo visualicen, se ve un punto en el centro de un cuadrado, si inscribimos el cuadrado en un círculo y borramos las aristas ¿qué queda?


Por lo tanto, el número CINCO y el C\M\ representa el conocimiento masónico primordial.

El quinario y el número cinco expresan un valioso simbolismo en un doble aspecto: como emblemas de generación, a la expresión, a la concepción de un nuevo ser, tanto en sentido biológico como intelectual o constructivo.

He de agradecer la cantidad de información de HH\ y HHnas\ van dejando en la red sin cuyas aportaciones no hubiese podido llevar a buen fin la encomienda de mi M\V\

Queda en el tintero la relación del quinario y la proporción divina, así que acabaré esta plancha de la mano de Rafael Alberti

A   LA DIVINA PROPORCIÓN

A ti, maravillosa disciplina,
media, extrema razón de la hermosura,
que claramente acata la clausura
viva en la malla de tu ley divina.

A ti, cárcel feliz de la retina,
áurea sección, celeste cuadratura,
misteriosa fontana de mesura
que el Universo armónico origina.

A ti, mar de los sueños, angulares,
flor de las cinco formas regulares,
dodecaedro azul, arco sonoro.
Luces por alas un compás ardiente.
Tu canto es una esfera transparente.
A ti, divina proporción de oro

 

He dicho

Fernando Merchán Marin, V Orden, Gr\9 y último del Rito Moderno o Francés, Grado33º R\E\A\A\, M\I\

Gran Secretario del Sublime Consejo del Rito Moderno para el Ecuador.

Ministro de Estado y Gran Orador del Supremo Consejo del Grado 33º para España del Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

Miembro del Supremo Consejo del Grado 33º y último del Rito Escocés Antiguo y Aceptado de las Islas Filipinas


Analizando la esencia de los conceptos “Escocés” y “Escocismo”

Cuando nos preguntamos por la verdadera naturaleza del término «Escocés», esta palabra puede tener múltiples sentidos y en ocasiones resulta difícil de aplicarle una precisa definición según los usos que se han hecho del mismo.
A finales del Siglo XVIII, con tantísima riqueza masónica, podríamos distinguir tres significados establecidos según su uso.
Primeramente, “Escocés” sería de entrada el nombre de uno de los más antiguos altos grados, que conoció además por causas diversas numerosas variantes con el paso de los años.
Estos grados Escoceses conservaron siempre una gran importancia en los altos grados.
Un segundo sentido, por extensión, llevaría a convertir en sinónimos de altos grados a los términos escocés y Escocismo, sea cual fuere el sistema de altos grados del que se tratara.
Finalmente, en los años 1760, apareció en Marsella un cuerpo masónico denominado “Madre Logia Escocesa”.
Esta denominación manifiesta la legitimidad pretendida por dicha madre logia para todos los grados, comprendidos también los altos grados. Practicaba un sistema en siete grados de los más clásicos: Aprendiz, Compañero, Maestro, Maestro Perfecto, Elegido, Escocés y Caballero de Oriente.

Según Roger Dachez, el término « Escocés » aparenta simplemente traducir que entre los primeros masones tanto en Francia como en Inglaterra, se mantuvo el recuerdo del importante papel desempeñado por Escocia en la maduración final del sistema especulativo masónico.
Las palabras escocés, escocismo, llegaron a significar todo lo que la Masonería designó como eminente, elegido, particularmente digno de respeto y honor, sin tener que ver con un origen propiamente relacionado con la propia Escocia».

Desde 1733 encontramos la huella de una logia Temple Bar, en Londres, habiendo conferido el grado de Maestro Escocés («Scots Master» o «Scotch Master»). Fue también conferido en una logia de Bath en 1735 y en la logia francesa» «St. George de l'Observance» no 49 de Covent Garden, en 1736.

Pierre Mollier nos recuerda la cita de Paul Valéry en la que nos indica: “Las palabras pierden su significado a medida que crecen en valor”. Esta observación se aplica muy particularmente a la palabra “escocés”. Este término atribuido en masonería, de múltiples significaciones, se encuentra siempre dentro de una aureola de prestigio y de misterio. Los francmasones han forjado incluso el neologismo “escocismo”, Igual de elusivo al tratar de obtener una definición precisa. Debemos recordar los significados sucesivos que la palabra pudo llegar a tener en las logias.

Cronológicamente, “escocés” supone en primer lugar el nombre de uno de los más antiguos altos grados. Es en París, el 11 de diciembre de 1743, que encontramos el primer testimonio de la existencia del término. La Grande Loge de France pone en guardia a los hermanos contra lo que parece como una novedad: «Teniendo en conocimiento que desde hace poco tiempo algunos hermanos se presentan bajo el título de maestro escocés y reivindican en algunas logias, derechos y privilegios…».
En 1744, en L'Ordre des francs maçons trahi, el “abbé Pérau” expresa: "No ignoro que está habiendo un vago ruido entre los francmasones, respecto a una cierta orden a la que llaman los Escoceses, superior a lo que se afirma, masones ordinarios y que tienen sus ceremonias y sus secretos aparte". Parece que hubo, desde el principio, varias escuelas concernientes a las ceremonias y secretos particulares de los escoceses. Así, en París, el grado misterioso del abbé Pérau, condenado en un primer tiempo por la gran Logia de Francia en 1743, es según toda probabilidad, el que nosotros conocemos bajo la denominación de Escocés de las 3 JJJ., también llamado Escocés de París o Escocés de Clermont.

En la Francia meridional, la masonería parece haber primitivamente practicado otro tipo de escocés denominado «de la Bóveda », muy pronto presentado como una  como una «Masonería de Perfección». Este «Escocés de Perfección» versión francesa del Royal Arch británico, retoma un tema clásico del esoterismo judeo-cristiano. Revela la existencia de una palabra perdida, el verdadero nombre de Dios, cuidadosamente conservada en una bóveda secreta oculta bajo el Templo de Salomón. Estos grados de Escocés conservarán siempre una gran importancia en la masonería de altos grados. Por extensión, a partir de mediados del siglo XVIII, los términos “escocés” o “escocismo” se convierten en sinónimos de altos grados.
Este significado es probablemente el más legítimo, en cualquier caso, el más lógico.
A principios del siglo XIX, cuando el Gran Chapitre General de Francia se enfrentará a la concurrencia de un nuevo rito titulado "escocés", reclamará alto y claro su "ecocismo" y su perfecta regularidad "escocesa".

En los años 1760, como ya hemos apuntado, aparece en Marsella un cuerpo masónico que se denomina “Madre Logia escocesa” apelando la legitimidad sobre todos los grados comprendidos los altos grados. Esta tiene una gran proyección en Provence, después más ampliamente en el Midi francés y finalmente en París. En esta Madre Logia, lo que terminará denominándose “Rito Escocés” profesado por esta y sus logias hijas se refiere ante todo a los altos grados. No obstante, por razones poco claras, los grados azules practicados por la madre logia presentaban algunas particularidades como la colocación de los grandes candelabros alrededor del cuadro de logia. Por deriva semántica, se vino hablando de grados simbólicos del Rito Escocés, es decir, del rito practicado por la madre Logia Escocesa, lo que habría sido unos años antes un sinsentido, de características fundamentalmente Modernas a nivel formal.

Al inicio del Siglo XIX la corriente animada por la Madre Logia Escocesa se fusiona con el Rito Escocés Antiguo y Aceptado, versión francesa de la masonería de los Antiguos, aportada desde las Antillas y de los estados Unidos de América por los masones refugiados de Santo Domingo. Los usos “escoceses” y “Antiguos y Aceptados” fueron amalgamados para la masonería simbólica en la “Guía de los masones escoceses” entre 1804 y 1820 (fecha de su edición). Poco a poco, el término “escocismo” vino equívocamente (pues realmente hace alusión a los altos grados de otros ritos) a designar el Rito Escocés Antiguo y Aceptado en todos sus componentes, tanto en lo referente a la masonería simbólica como en la de los altos grados. Esta acepción de la palabra es no obstante puramente francesa, puesto que en la mayor parte de los países el Rito Escocés Antiguo y Aceptado (o también denominado simplemente Rito Antiguo y Aceptado como sucede en Inglaterra y Gales, por ejemplo) suele ser exclusivamente un sistema de altos grados.

Al final de esta revisión histórica, y como ya apunté, uno puede preguntarse si no sería apropiado reservar el término "escocismo" para la masonería de altos grados, cualquiera que sea el sistema en cuestión.

Queda la pregunta del origen de la palabra "escocés". ¿Por qué los masones de la primera masonería especulativa, en la década de 1730, bautizaron el rango terminal donde fueron revelados los secretos más elevados de la Orden, Maestro "Escocés"? Encontramos, un poco antes, rastros de maestros escoceses en algunas logias inglesas. Es probable que conocieran el papel esencial de la masonería operativa escocesa en la formación de la masonería moderna especulativa. Al comienzo de la Francmasonería especulativa, este calificativo honró el origen geográfico, muy real, de los misterios más profundos de la Orden. 

Joaquim Villalta, Vª Orden, Gr.·. 9, 33º
M.·. I.·.
Director de la Academia Internacional de la Vª Orden - UMURM
Gran Orador del Sublime Consejo del Rito Moderno para el Ecuador
Miembro Honorario del Soberano Grande Capítulo de Cavaleiros Rosa-Cruz de Portugal - Gran Capítulo General del Rito Moderno y Francés de Portugal
Miembro Honorario de la R.·. L.·. Estrela do Norte nº 553 del Grande Oriente Lusitano
Gran Canciller para Europa del Gran Oriente Nacional Colombiano
Miembro Honorario del Soberano Supremo Consejo del Grado 33 para el Escocismo de la República del Ecuador
Miembro Honorario del Supremo Consiglio del 33º ed Ultimo Grado del R.S.A.A. per l’Italia e sue Dipendenze
Miembro del Suprême Conseil du 33e Degré pour la France du Rite Ancien et Accepté (Cerneau's Rite)
Pasado Presidente de la Confederación Internacional de Supremos Consejos del Grado 33º del R.·. E.·. A.·. A.·.
Muy Poderoso Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo del Grado 33º para España del Rito Antiguo y Aceptado
Gran Comendador del Soberano Gran Consejo de los Príncipes del Real Secreto de España, Rito de Perfección.
Masonólogo

Bibliografía base:

Pierre Mollier, “Naissance et essor du Rite Écossais Ancien Accepté en France :
1804-1826”
ÉDITIONS DERVY
2004

Pierre Mollier, Encyclopédie de la franc-maçonnerie”, Le Livre de Poche, 2008 “
article « Écossais »

R.Dachez, Histoire de la Franc-maçonnerie Française, p.61, PUF 2003.

Paul Naudon, Histoire générale de la franc-maçonnerie, Presses universitaires de France, 1981


Franz Liszt: el genial referente paradigmático del Humanismo y la Religiosidad en la Francmasonería


A lo largo de mi formación como músico y de mi trayectoria como pedagogo y concertista, la figura de Liszt ha sido para mí un referente en todos los terrenos derivados del Arte Musical. En el plano interpretativo, la aportación lisztiana al piano eleva la técnica instrumental a cotas hasta ahora aún no superadas, a la vez que introduce el concepto de recital moderno llegando él mismo a convertirse en un fenómeno de masas sin precedente alguno y probablemente en el más grande virtuoso de todos los tiempos. Como compositor, su extensa y variada obra desarrolla al máximo los principios propios característicos del romanticismo del siglo XIX apuntando innovaciones armónicas y formales introductorias de períodos estéticos posteriores, avanzándose así a su tiempo e influyendo en compositores futuros. Ya rico i famoso, trabajó incansablemente para potenciar y dar a conocer la obra de otros músicos como Wagner o Berlioz, dejando incluso en un segundo término la proyección y difusión de su propia producción. Este altruismo, humanidad y espíritu filantrópico lo desarrolló paralelamente en su faceta como pedagogo - básicamente en Weimar - a través de la formación de varias generaciones de intérpretes mundialmente reconocidos, promotores de las posteriores Escuelas Pianísticas referentes del siglo XX . Es loable el hecho de que nunca cobró un céntimo por sus enseñanzas, como también lo es su lucha infatigable para conseguir una dinámica cultural donde las manifestaciones y sensibilizaciones artísticas pudieran estar al abasto de todas las clases sociales sin distinción, mediante una decidida participación del los poderes públicos a quienes corresponde la responsabilidad de cubrir este derecho ciudadano.
Liszt fue iniciado en la Logia La Unión de Frankfurt el 18 de septiembre de 1841, recibiendo en presencia del futuro emperador Guillermo I, el Segundo Grado el 8 de febrero de 1842 en la Logia de San Joan de la Concordia, a l’Orient de Berlín, donde cuatro días antes había sido nombrado miembro de honor, artista adorado, hermano y hombre querido. Su exaltación al Tercer Grado se produjo en 1870 en la Logia La Unión, al Oriente de Budapest. Franz Liszt fue también miembro de honor de diversas logias, dando numerosos conciertos en muchas de ellas, o en sociedades musicales vinculadas a algunas otras. A partir de 1848 cesó su ritmo de visitas a les logias. Su catolicismo viró hacia el misticismo y en 1861, con un gran proyecto de renovación de la música sacra, se instaló en Roma donde fue nombrado Abad en 1865. Esta época coincidió con el agravamiento del conflicto entre la Iglesia y la Francmasonería, bajo el pontificado de Pío IX. Al inicio de 1870 empezó nuevamente, aunque de manera discreta, a frecuentar las logias, dando en 1881 y 1882 diversos conciertos en San Petersburgo organizados por la Logia La Discreción.

He creído interesante transcribir sus respuestas dadas a las preguntas propuestas el día de su iniciación:
1) ¿Cuál es el destino del Hombre?
El destino del Hombre es aspirar al mayor perfeccionamiento posible en el dominio de la Verdad, de la Bondad y de la Belleza, y por éste – en la medida donde sus débiles límites se lo permitan– acercarse a la semblanza de su Creador.

2) Que espera de la Francmasonería para su espíritu, para su corazón y para su felicidad temporal?
Creo y espero entrar en una corporación de personas buenas y serias que se reúnen trabajando en sabias finalidades y donde su validez ha estado confirmada a lo largo de los tiempos; creo y espero que mi espíritu encontrará de que nutrirse y que en los momentos de desamparo y de peligro veré unas manos fraternales extendidas hacia mí.

3) Que puede esperar la Francmasonería de usted?
La Orden me encontrará constantemente dispuesto en palabras y en actos para tomar parte en todas sus buenas finalidades y unirme a sus venerables trabajos. La Orden, en la profunda sabiduría a la que creo con un temor respetuoso, encontrará en mí, en todo aquello que no vaya en contra de mis opiniones religiosas y políticas, en mi honor y en mi conciencia, un neófito dócil, un miembro obediente.

Anexos:

             Carta de Candidatura de Franz Liszt




Primera Pregunta de Orden


Segunda Pregunta  de Orden


Tercera Pregunta de Orden



Joaquim Villalta, V Orden, Gr.·. 9 y Último del Rito Moderno o Francés, 33º R.E.A.A.
M.·. I.·.
Director de la Academia Internacional de la V Orden - UMURM
Gran Orador del Sublime Consejo del Rito Moderno para el Ecuador
Miembro Honorario del Soberano Grande Capítulo de Cavaleiros Rosa-Cruz de Portugal - Gran Capítulo General del Rito Moderno y Francés de Portugal
Miembro Honorario de la R.·. L.·. Estrela do Norte nº 553 del Grande Oriente Lusitano
Gran Canciller para Europa del Gran Oriente Nacional Colombiano
Miembro Honorario del Soberano Supremo Consejo del Grado 33 para el Escocismo de la República del Ecuador
Miembro del Supremo Consejo del Grado 33º y Último del Rito Escocés Antiguo y Aceptado de la Islas Filipinas
Miembro Honorario del Supremo Consiglio del 33º ed Ultimo Grado del R.S.A.A. per l’Italia e sue Dipendenze
Miembro del Suprême Conseil du 33e Degré pour la France du Rite Ancien et Accepté (Rite de Cerneau et Rite Écosais Ancien et Accepté)
Pasado Presidente de la Confederación Internacional de Supremos Consejos del Grado 33º del R.·. E.·. A.·. A.·.
Muy Poderoso Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo del Grado 33º para España del Rito Antiguo y Aceptado
Gran Comendador del Soberano Gran Consejo de los Príncipes del Real Secreto de España, Rito de Perfección
Masonólogo

Sobre la "imprecisa y manipulada" definición de los conceptos "Escocés" y "Escocismo".

En otros estudios hemos abordado el porqué de la gestación de la práctica Ritual del Mason Word, origen de las diversas y posteriores versiones de este Rito que desembocaron con el paso de los años y con mutaciones o añadiduras en la totalidad de la práctica ritualística francmasónica hoy conocida, sea del tipo que fuere, a pesar de que podamos herir con ello románticas concepciones o bellas fantasías.
Nuestra intención es esclarecer nuestros verdaderos orígenes y, a pesar de que en mi andadura personal se me han venido abajo falsos mitos e infundadas ideas legendarias que me fueron transmitidas erráticamente, la realidad aparecida ante mis ojos no es menos digna que las impresentables tesis ocultistas que a día de hoy todavía se transmiten de boca a oreja a los neófitos, sino al contrario: dan un sentido aún más perenne y sólido a nuestra Orden dotándola de una cualidad universal y de una vigencia en sus valores sin apenas precedentes comparables con otras instituciones, llámense filosóficas, espirituales o filantrópicas.

Así, la creación del MW hacia 1637 por los masones calvinistas de la logia escocesa y calvinista de Kilwinning, nace como respuesta a la obligación impuesta por Schaw de practicar un arte de memoria. Esta logia, rechazando la continuidad de la práctica del rito de recepción prescrito por los Antiguos deberes anglicanos, opta por la forma de un catecismo simbólico, cuyo vocabulario está compuesto de imágenes conformemente a la tradición de las artes de memoria, pero unas imágenes verbales (metáforas, alegorías) debido en una parte a la confesión presbiteriana y por otra del carácter iconoclasta característico del calvinismo que forzó a dicha logia a esa sustitución de la imagen verbal en lugar de la imagen plástica.
Puede resultar chocante cómo, aprovechando o dotándose de este instrumento ritual, la Gran Logia de Londres innovó ontologizando el rito originalmente calvinista de MW y se dio como marco jurídico las Constituciones de 1723, abriendo las puertas de la logia a todos los practicantes de la religión natural (orto-praxis moral) sin consideración para las ortodoxias que quedaban sólo como opiniones individuales rompiendo por este eclecticismo con la religiosidad confesional de los Antiguos deberes, abriendo la puerta a los ateos teóricos y al deísmo.

Antes de proseguir, creo que se hace necesario para centrar el término “Escocés”, utilizado en el título de esta entrada, hacer un pequeño resumen de aspectos fundamentales tratados en anteriores artículos: desarrollado entre 1696 (Edimburgo) y 1711 (Trinity College), antes de ser transmitido por Anderson en 1714 a los futuros creadores de la Gran Logia de Londres de 1717, recordemos que el rito de MW fue importado desde Escocia a Irlanda (1711) e Inglaterra. En Inglaterra solo era practicado por la Gran Logia de Londres: las otras logias de Inglaterra, que se podrían con todo derecho llamar las antiguas logias operativas inglesas como las de York y de Chester, e incluso como la que publicó las Constituciones Roberts en 1722, practicaban el rito de los Antiguos deberes operativos ingleses. Así, aunque algunos sigan ignorándolo, los fundadores de la Gran Logia de los Antiguos practicaban el mismo rito que la Gran Logia de Londres (a saber el rito de MW), pero gran número de ellos, siendo católicos, reprochaba a esta última haber roto con la religiosidad de los Antiguos deberes operativos (lo que se explica visto la orientación filosófica y ecléctica, es decir no confesional, de la Gran Logia de Londres) y fue una de las razones para que los masones irlandeses, la mayoría católicos, rompieran con la Gran Logia de Londres (cuyo rito practicaban) e integraron al Mason Word las oraciones inspiradas de la religiosidad confesional de los Antiguos deberes operativos.
Los fundadores de la Gran Logia de los Antiguos rechazaron la opción filosófica de la Gran Logia de Londres y prefirieron a la religión natural, una religiosidad confesional inspirada de aquella de los Antiguos deberes operativos. No obstante, aunque la Gran Logia de los Antiguos tendió a inspirarse en el modelo religioso surtido por los Antiguos Deberes no practicaba sin embargo su rito: practicaba una versión del Mason Word.
Entre 1710 y 1725, las logias escocesas que practicaban el rito del MW eran de dos tipos: habían por un lado las logias calvinistas federadas por la logia-madre calvinista de Kilwinning, y había por otro lado las logias episcopalianas (arminianas, es decir próximas a los católicos y anglicanos) como la logia de Dumfries que practicaba en efecto el rito de MW (poseemos dos rituales de MW de esta logia: el Dumfries n° 4 de 1710, y el ritual de 1727 divulgados en la Confesión de un masón). Los jacobitas siendo católicos solo habrían podido ser recibidos en logia en el rito de MW en dos marcos instituidos: o la Gran Logia ecléctica de Londres, que estaba abierta a todas las confesiones, o en una de las logias no calvinistas de Escocia, como la logia episcopaliana de Dumfries, que practicaba este rito.
Por tanto, insistimos una vez más, la masonería introducida en la Europa continental era del tipo o forma de lo que se calificaría como “Modern”.

Los conceptos “Masonería Escocesa”, “Escocismo” o “Escocés”, son muy vagos y de imposible definición, salvo el de la particular génesis formal/ritual referida al Mason Word. En cuanto a las otras acepciones del término “escocés”, se abre un abanico de variables que en muchos casos han tergiversado la realidad original de la francmasonería (especulativa, por supuesto, y de la que somos únicamente herederos directos).
Cuando abordamos la figura de los Maestros Escoceses de los años 1740 en Francia que van a dar origen a la proliferación continental de sucesivos grados presentados como terminales en su momento (y sirve la posterior argumentación para los Scots Masters mencionados en algunas logias londinenses de los años 1730) y, consecuentemente, al nacimiento de lo que hoy conocemos como Altos Grados, se abre la veda que da entrada a las presupuestas prerrogativas y privilegios de un grupo de élite presentado apócrifamente como curador de la Orden y sus misterios, así como una puerta al sincretismo de lo más desordenado.
Curiosamente, cuando miramos estos primeros altos grados, como el “Maître Parfait”, donde la leyenda de Hiram no juega ningún rol particular, vemos que la Palabra final comunicada es precisamente la misma que la Palabra del grado de Maestro de toda la tradición Francesa. Como bien apunta Roger Dachez, esto nos podría hacer sugerir que se tratara de un antiguo grado (distinta forma) de Maestro.

Vemos por otra parte, sobre textos de 1725-26, un grado situado en tercera posición estructurado por los mismos secretos del grado de “Maestro de Logia” algunas décadas después, o como “Escocés de las 3 JJJ” o en la versión “Escocés de París” de 1745, poseyendo un contenido sustancialmente idéntico al de Maestro Instalado del de tradición inglesa de 1760. En esta línea de investigación, todo apunta a que los antiguos “Altos Grados” no lo fueron en realidad. Fueron alternativas del grado terminal, problema propuesto en los años 1720 en Inglaterra, y al cual la formación del grado de Maestro hirámico aportó una primera respuesta que finalmente adoptó la Gran Logia de Londres, pero cuyo proceso abrió diferentes vías paralelas de resolución que siguieron funcionando simultáneamente y que atravesaron también el Canal de la Mancha.

Estas originales semillas dieron múltiples y variados frutos en un abonado y diverso suelo continental (por ejemplo baste recordar la porosidad y permanente interrelación franco-belga). No nos extrañemos, por tanto de que el concepto “grados escoceses” cualificados a todos aquellos que se consideraban por encima – más sin razón que con ella- del Magisterio “estándar”, sean perfectamente aplicables a los Altos Grados codificados en el Rito Francés o Moderno llevado a cabo en los años 1780 y practicados por doquier con anterioridad. Véase su forma estructural “Modern” e incluso para aquellas pretendidas logias denominadas escocesas (Marsella, Aviñón o París) que también tenían tres primeros grados de tipo Moderno donde la originalidad diferencial en la estructura simbólico-ritual, era casi simplemente el tema de la ubicación del ternario SE-SO-NO y su asimilación con los pilares SFB, aunque fiel a su genética “Modern”, conservaba el ternario Sol, Luna, M de L como 3 GL.

Quiero finalizar este artículo, al hilo de lo que más arriba apuntaba, agradeciendo las luces aportadas por aquellos Hermanos que con su esfuerzo, trabajo, ejemplo y tesón, me han dado las pistas y herramientas para sacarme de la duda y del error. Respeto por supuesto las opiniones y vivencias masónicas de cada miembro de la Orden. Pero siento gratitud hacia esos Hermanos que han permitido que la mía sea más coherente para conmigo mismo, a la luz de aquello que hoy veo más claro.
A todos ellos, gracias por sus enseñanzas. Me siento más libre.

Joaquim Villalta, V Orden, Gr.·. 9 y Último del Rito Moderno o Francés, 33º R.E.A.A.
M.·. I.·.
Director de la Academia Internacional de la V Orden - UMURM
Gran Orador del Sublime Consejo del Rito Moderno para el Ecuador
Miembro Honorario del Soberano Grande Capítulo de Cavaleiros Rosa-Cruz de Portugal - Gran Capítulo General del Rito Moderno y Francés de Portugal
Miembro Honorario de la R.·. L.·. Estrela do Norte nº 553 del Grande Oriente Lusitano
Gran Canciller para Europa del Gran Oriente Nacional Colombiano
Miembro Honorario del Soberano Supremo Consejo del Grado 33 para el Escocismo de la República del Ecuador
Miembro del Supremo Consejo del Grado 33º y Último del Rito Escocés Antiguo y Aceptado de la Islas Filipinas
Miembro Honorario del Supremo Consiglio del 33º ed Ultimo Grado del R.S.A.A. per l’Italia e sue Dipendenze
Miembro del Suprême Conseil du 33e Degré pour la France du Rite Ancien et Accepté (Rite de Cerneau et Rite Écosais Ancien et Accepté)
Pasado Presidente de la Confederación Internacional de Supremos Consejos del Grado 33º del R.·. E.·. A.·. A.·.
Muy Poderoso Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo del Grado 33º para España del Rito Antiguo y Aceptado
Gran Comendador del Soberano Gran Consejo de los Príncipes del Real Secreto de España, Rito de Perfección
Masonólogo

Introducción de "Senda de las Luces Masónicas" (New-York, 1821) del IPH Joseph Cerneau: idéntico encabezamiento del Prefacio del "Régulateur du Maçon" (edición impresa de 1801)

Introducción de "Senda de las Luces Masónicas" (New-York, 1821) del IPH Joseph Cerneau: idéntico encabezamiento del Prefacio del "Régulateur du Maçon" (edición impresa de 1801).

Además el análisis del libro muestra claramente la práctica e instrucciones de los grados simbólicos propios del Rito Francés o Moderno.

Es del todo imprescindible el estudio pormenorizado de los materiales que se dieron en uno y otro continente contrastando sus contenidos filosóficos, rituales, simbólicos y masónológicos organizativos conducentes a unos resultados auténticos fundamentados por un estudio académico serio y racional, con una metodología científica que nos libere de falsas conclusiones fundamentadas en el error y en la mentira, en ocasiones, ignorante o programada.

Joaquim Villalta, V Orden, Gr.·. 9 y Último del Rito Moderno o Francés, 33º R.E.A.A.
M.·. I.·.
Director de la Academia Internacional de la V Orden - UMURM
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Masonólogo

Croire ou respecter: un debat sur la perenité de nos rites et symboles

Réflexions en marge des travaux du Conseil du S. Chapitre «La Rose-Croix du Léman» de Genève le 30 mai 2024 et de la rencontre à Bruxelles avec le S. Chapitre     « Les Chevaliers de la Lumière » de Mons le 15 juin 2024



On est parti dans nos vallées d’une question concrète « Que faire avec la devise VAM, le décor poignard, le choix « vengeance ou justice » dans l’interprétation du rituel du Ier (Élu secret) des Hauts Grades du RF Moderne ? »  

Une étude de départ sur l’histoire des décors et devises du Ier Gr :. Du RFM, par le F:. Jean van Win [i], a occasionné un riche échange de vues, expériences et considérations, dans nos travaux à Genève et au Conseil commun avec nos FF et SS de Mons, à Bruxelles au mois de juin. Au fil des échanges, la recherche c’est enrichie d’un apport substantiel d’expériences personnelles des participants et des analyses de notre TS :. (et S:.G:.C:.) Fabrizio. Une péripétie passionnante, parsemée de questions plutôt que de réponses : 

Ces échanges nous ont porté vers des réflexions plus profondes pour l’étude des rituels et l’interprétation de nos symboles, en incluant leur pérennité historique.

Bien entendu, notre travail ne se donne pas autorité de délibérer ou décréter ce qu'on doit penser ou croire, nous nous devons plutôt de mieux comprendre ce nous exprimons dans nos rituels.

L'homme libre sait ce qu'il fait et fait ce qu'il sait.

*

L’étude du document cité, signe par le F:. Jean van Win, concernant la bien connue devise du Premier Ordre de Sagesse et le rappel historique du rituel résumé par le TSPM ont occasionné un plein d’échanges et d’interrogations, dans les deux assemblées. Nous retenons une brève synthèse des pensées et des questions susceptibles d’intéresser et de continuer la réflexion des Chapitres suisse et belge du Suprême Conseil du Rite Moderne pour la Suisse :

Il s’agit du mythe fondateur : après le meurtre de Maître Hiram par trois mauvais compagnons, le légendaire Roi Salomon envoie des Maîtres Maçons pour attraper les coupables et punir le crime à la manière de l’époque biblique. Les participants aux Conseils des Élus ont suivi les évolutions du rituel du Ier Ordre du RFM en fonction des temps historiques, mais aussi les nombreuses adaptations de la vengeance qu’ils ont observé dans les LL et les Obédiences où ils ont poursuivi leur « carrière » maçonnique. On en a cherché les raisons ; il est saillant de voir comment les textes d’origine ont été altérés en fonction de l’air des temps et des préférences locales des Grandes Loges, Grands Orients et Loges particulières[ii].

En notre époque les questionnements sont nombreux : Un rituel de justice, mais poignard en main pour toujours ? Il y a peut-être un temps pour toute chose, mais heureusement notre époque n’est pas ce temps-là. On observe que la vengeance cruelle (qui devrait peut-être susciter notre horreur de la violence ?) a été ajustée successivement en justice divine par « le maître des batailles », ensuite en suicide des mauvais compagnons épargnant le sang sur les mains des justiciers. Le sens a été finalement sublimé en lutte personnelle des maçons contre leurs propres mauvaises pulsions de violence. Nous avons longuement discuté les sens du mot Justice. La justice primitive « œil pour œil » des temps bibliques (elle-même un progrès de proportionnalité pour son temps historique) a été convertie en adoption de la justice autorisée des lois et des punitions institutionnalisées, règlementées et impersonnelles ; punir oui, sans pardon, mais en suivant les règles et procès des lois ? N’y a-t-il pas pourtant un temps pour toute chose sous le soleil ? D’autre part, est-ce assez maçonnique pour nous aujourd’hui ? Où sont la charité et la prise de responsabilité personnelle ? Ou sont en tout cela la fraternité, le pardon et la possibilité des nouveaux départs ? Plein de questions ! Faut-il pourtant y répondre en modifiant en conséquence les textes d’origine, ou plutôt par une interprétation qui les replace dans leur temps ? Faut-il plutôt lire les horreurs de nos légendes comme on devrait lire les livres sacrés des religions, non pas pour justifier les violences mais au contraire, pour apprendre des exemples du mal, afin de choisir le bien et devenir meilleurs ?

En marge des questionnements sur l’exégèse des textes, un état de fait s’impose, préoccupant.

Il est bien documenté qu’il y a eu de nombreuses altérations des rituels, des décors, des interprétations, pour des raisons plutôt profanes. L’historique est fascinant à suivre dans les livres publiés récemment. En fait, peu de choses ont été rajoutées dans les rituels et décors, plutôt nombre d’éléments ont successivement disparu. Chose incongrue, même les récits mythiques inclus dans les rituels ont été faussés ici et là, pour éviter telle référence biblique qui fâche ! Bien étayée, cette constatation ne conduit-elle pas vers une conclusion pratique ? Ou alors, sommes-nous restreints à nous lamenter devant cette porte déjà ouverte ? Après tout, même la Bible a été réécrite de plusieurs manières, pour ne pas parler des codes et lois de la Justice, qui ont changé avec les siècles et les cultures…

Des FF et SS se sont posé la question de quand ces altérations ont été faites, où, pourquoi et par qui. Dans ce contexte, quelle est l’implication du choix qu’au Rite Moderne (en fait celui initial) nous tenons à pratiquer nos rituels tels qu’ils ont été écrits à l’origine ? Se laisser taxer de réactionnaires parce qu’on pratique les rituels comme ils étaient, tout en respectant la liberté absolue d’interprétation personnelle ? Le Gr :.Or :., se demandait plutôt comment fonder le respect légitime pour les traditions, en même temps que les choix qui en diffèrent, afin de préserver, sans s’aplatir, la tolérance réciproque, l’harmonie et surtout la Fraternité.

Le S:.G:.C:. Fabrizio souligne la question clé – comment interpréter à présent ces mots et décors, mais aussi les changements commis concernant, par exemple des symboles, comme la très heureuse expression GADLU, la Bible ouverte à l’ Évangile de St Jean ? Comment faire face à ce qu’on peut appeler « l’allergie » de certains FF et SS, et surtout Ob :., à ces symboles conçus justement pour faciliter une cohabitation de la diversité spirituelle maçonnique?.

Faut-il adapter les mots aux temps et aux évolutions des sociétés, recycler nos décors, épurer les rituels et légendes de nos Grades de Sagesse ? ou plutôt conserver avec fidélité la tradition, au lieu de cautionner, au nom du « progrès », les opportunismes historiques du « politiquement correct » que nos érudits décrient régulièrement ?

On le voit bien, « le diable est dans les détails », dans le ressenti dogmatique des décors, mots et gestes. En ignorant que tout ceci est symbole : l’ABC maçonnique.

*

En fait, on respecte un rituel parce qu'il dit vrai ou parce qu’il dit la tradition ? Les rituels sont-ils lettre d'Évangile... ou écrits de main faillible de Maçon ? Les interpréter dans leur lettre ou, avec bon sens, dans leur esprit ?

En essence ; en Maçons, sommes-nous capables de vivre dans notre temps, changer avec notre temps, penser et agir en notre temps, tout en sauvegardant la lettre et les symboles de nos traditions premières ? Que faire de plus pour réunir ce qui est épars ?

*


Le défi à terme de notre Puissance Maçonnique est de démontrer le bien-fondé de la pratique des rituels du RMF en leur forme d’origine, tout en accueillant une diversité d’interprétations, le changement des époques, pays, régimes politiques et surtout la liberté absolue de conscience et de croyance ou non croyance religieuse des FF et SS. Une voie de raison serait de promouvoir et pratiquer une attitude lucide et civilisée de sublimation des concepts en cause, de déchiffrer le récit mythique incarné dans ces rituels. Cette érudition semble être une condition nécessaire de coexistence, qui permet de ne pas refaire éternellement des guerres de religions, d’hérésies et d’idéologies. Comme il semble, il faut s’élever au-dessus des interprétations littérales de ces mots et symboles mais aussi de la laïcité simplifiée, réductrice, intolérante, conçue comme antireligion.

Malheureusement, comme dit notre TS, cette manière de penser et de juger est née avec les monothéismes, devenus religions d’État et méthode exclusive. La certitude unique a détruit l’antique permissivité envers une multitude « de fait » des dieux et de croyances. Les empires d’avant toléraient l’imperfection des formes et des interprétations multiples. Par la suite et à présent, au lieu de considérer la diversité inévitable, où on œuvre pour réunir dans la bonne volonté des vues qui sont et qui ont le droit de rester éparses, on part typiquement d’un jugement préalable de Vérité et de valeurs, on impose les formes qui en résultent, on pense que certaines fondations, « les nôtres », sont les seules véridiques et les autres irrémédiablement fausses, à exclure. Que reste-t-il de notre noble rêve de Franc-maçonnerie universelle ?

Ce que nous chercherons dans notre réflexion présente est la forme fédératrice qui peut convenir à tous, avec des termes ouverts, qui permettent à chacun de comprendre, d’avoir et d’affirmer son interprétation personnelle tout en respectant un rituel symbolique partagé. Pour pouvoir assister, prendre part, dire let mots et vivre un égrégore sans se faire violence. Le terme Grand Architecte de L’Univers est un bon exemple de tentative optimiste pour permettre cette tolérance mutuelle.

Bien entendu, ceci requiert une pensée conceptuelle plus haute, qui reconnait et comprend les récits mythiques et bibliques dont les symboles sont incarnés dans nos rituels – ou tout est symbole – au lieu de croire qu’il s’agit de professions de foi figée. Autrement c’est comme si on contestait le nom des jours de la semaine ou des mois de l’année qui étaient jadis des noms de dieux de l’Olympe, les mots-on n’y croit pas.

Comment contribuer à cette œuvre ?

Selon le Gr :. Or :., un des nombreux choix possibles, est d’être conservateur concernant la lettre des textes et des récits légendaires, tout en étant flexibles et tolérants avec les changements incessants de définitions et des « certitudes », induits par les contextes et les époques qui passent. De même avec les préférences d’interprétation, faites en toute liberté de conscience (tant que ces choix ne sont pas imposés à autrui).

Pour préserver la paix, suivons la tradition avec bon sens, respectons et rappelons – en bons Maçons civilisés - les symboles bibliques les mythes et récits fondateurs, parfois anachroniques, sans mettre en cause nos convictions profondes en ce siècle XXI. Ces récits des ancêtres sont des formes qui restent  la colonne vertébrale de nos rituels, leur origine. Dans les cas où notre esprit moderne se rebiffe, faisons un peu comme ces Vice-rois du Nouveau Monde Espagnol qui disaient des décrets venus de loin du Roi d’Espagne, sans rapport avec leur réalité locale : « se obedece pero no se cumple » (on obéit mais on n’applique pas). Est-ce être trop opportuniste ?

Nous avons le droit de croire ou de ne pas croire, mais en nos vallées s’agit-il de croire ou de respecter ?

Notre TS propose d’effacer le mot croire de notre vocabulaire. Obligé à croire ou à dire qu’on croit ou non, rectifier et éplucher les mots, mène à une inquisition du politiquement correct, qui est une érosion de la liberté à laquelle nous sommes si attachés.

 


Jérusalem: le mur à l’occident, de pierres éparses


Poser cette question « CROIRE OU RESPECTER ?» protège notre liberté au milieu de la diversité parfois irréductible. Notre but partagé devrait être de comprendre le rituel dont nous sommes les acteurs, le sens de ce que nous y exprimons. L’émancipation est de « connaitre la cause des choses », comme dirait Virgile, comprendre d’où nous venons et où nous allons.

Car l’homme libre sait ce qu’il fait et fait ce qu’il sait.

 

Ioan Tenner, Ve Ordre Grade 9, Grand Orateur du Suprême Conseil du Rite Moderne pour la Suisse



[i]Jean van Win, Les initiales V.A.M. sur le cordon d’Élu au Premier Ordre du Rite Moderne Français, 2012

[ii] Meisner, Marc, Rite Français: Version Originale Ephaestos, Londres 2022 ISBN-13 ‏ : ‎ 979-8361403141, comparé à Grand Chapitre Général Du Grand Orient De France, Rituel de référence 1er Ordre éd. 2007