Hora: 23 jul 2022 03:00 p. m. Santiago.
Unirse a la reunión Zoom
https://us02web.zoom.us/j/88497873935...
ID de reunión: 884 9787 3935
Código de acceso: 818954
A tal efecto publicó un comunicado el 1 de junio de 2022, y solicitó su incorporación a la "Unión Masónica Universal del Rito Moderno".
Con el acuerdo unánime de todos sus miembros, el Consejo de Administración de la Unión Masónica Internacional del Rito Moderno aprobó esta petición el 8 de junio de 2022 e incorporó como miembro de pleno derecho al "Suprême Conseil du Rite Moderne pour la Suisse".Con el conocimiento de la calidad de los miembros que integran este Supremo Consejo, les damos la bienvenida con la seguridad de que nos enriquecerán inmensamente con sus aportaciones, criterios y labor.
En este espacio hemos, creo, ampliamente abordado el tema de la génesis, distribución y reordenación de los Altos Grados de gran proliferación en el XVIII, bajo la estructura creada por el Gran Capítulo General de Francia del 1784 en la ocurrente distribución por familias conocidas con el término de Órdenes. Hemos valorado asimismo desde diversos planos filosóficos e iniciáticos, la idoneidad de los mismos, controvertidos cuanto menos, así como escuchado voces reflexivas e incluso irónicas y ácidas, como las de Bésuchet , en esa vorágine de multiplicación de grados, la mayoría impracticables. Nuestras investigaciones nos han hecho entender como ciertamente el Phylum iniciático del Rito Moderno finalizaba sin duda en el Rosacruz, un Cuarto Orden terminal siendo durante mucho tiempo el Nec Plus Ultra Masónico hasta el desembarco de la nueva estructuración propuesta por el REAA, que imponía su influencia en los altos grados con la habilidad de generar un paralelismo del R+ con su 18º, estrategia inteligente que hundía a la cumbre Moderna provocando la excitación de aquellos cuya posible ansia por las decoraciones y títulos impulsaba, cual resorte, a la búsqueda del más allá. Así pues, el sistema del Gran Capítulo General, por más Quinto Orden universal definido en los RRGG del 1784 y codificado por el Metropolitano en el listado de 1807, no dejaba de ser un intangible para muchos, con la cual cosa, ya de facto, en el 1858 el ritual Murat se basaba sobre una progresión de siete grados en los que los tres primeros pertenecían al Rito Francés, y el resto, el Rosacruz 18º, Caballero Kaddosch 30º, Príncipe del Real Secreto 32º y Gran Inspector General 33º eran grados del Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Resulta, pues difícil creer que esto fue fruto del simple azar. El sistema de los Órdenes de Sabiduría quedaba tocado de muerte. En Holanda, tras la fundación en 1803 de la Orden de los Altos Grados tras la ocupación francesa, y muy potenciado en la actualidad su vigor y fuerza vía su nueva y remodelada web, se nos presenta ante el público una ininterrumpida práctica de más de 200 años del sistema de siete grados que supuestamente habría bebido su legitimidad de dicho contacto galo. Esa legitimidad secuencial no fue filial si no realizada por analogía, y lo que es indudablemente cierto, es que la práctica de todos los Órdenes no fue ininterrumpida, dado que, en realidad, no se conferían de la forma regularmente establecida. Me explico: El Rito planteado tras el magisterio con los Grados de Elegido, Escocés, Caballero de Oriente y Soberano Príncipe Rosacruz mutó en su forma de ser conferido, dado que debido al carácter explícitamente cristiano del último grado se decidió prohibir conferirlo salvo por comunicación, confiriendo ritualmente sólo los tres anteriores. Esta prohibición duró tres años, hasta 1806, donde se dejó a criterio de los Capítulos la elección del método de concesión. Sin embargo, en los siguientes 50 años, el sentir al respecto se revirtió radicalmente, decidiéndose en 1854 que desde esa fecha, el Grado de Rosacruz debería ser conferido ritualmente, mientras que los “Grados Intermedios” se harían por comunicación. Increíble, pero cierto: el tema se revertió cual calcetín. Así pues, este sistema en Siete Grados con sus respectivas Órdenes de Sabiduría solamente se practicó ininterrumpidamente de forma Regular y legítima desde 1822 en Brasil. Pero una vez pasado el tiempo, asentados los sistemas rituales, estratégicamente ubicados los sistemas relacionales entre Potencias Masónicas de Altos Grados, había que velar por llevar al Rito Moderno o Francés al lugar que siempre le correspondió, y este, jamás era estar en inferioridad de escalafón a ningún otro, dígase lo que se quiera sobre el phylum iniciático, el lanzar la mirada hacia todos los grados físicos y metafísicos de todos los sistemas. Eso ya era obvio de por sí, pero había que ir concretando. Las soluciones para la activación, reactivación o desarrollo de este Vº Orden podían ser muchas y variadas (algunas más acertadas que otras), pero era menester encontrar en función de la incontestable legitimidad de la Potencia correspondiente, en este caso el Supremo Consejo del Rito Moderno, de Brasil, Chef d’Ordre Universal en cuanto a su práctica ininterrumpida e incluso única en un tiempo, buscar un método racional, lógico, con un mensaje coherente al espíritu del Rito Moderno y de un contenido incontestable. Así pues pasaremos a exponer la distribución en 9 Grados (una distribución que comparto en lo personal por su coherencia y brillantez ritual, dicho sea de paso), ubicados el 8º y el 9º en el Vº Orden, expuesto mediante el análisis y argumentación dada por el M.•. Il.•. H.•. Antonio Onías Neto, Soberano Gran Inspector General Honorario del Supremo Consejo del Rito Moderno, con sede en Brasil:
Algunos Hermanos afirman que no existe fundamento histórico o institucional para la institucionalización de los Grados 8 y 9 para el Rito Moderno. Veamos primero si históricamente existieron los grados citados anteriormente. Respecto a este asunto, la publicación francesa “Le Rite Français Moderne - I. M. R. E. T. 1986” afirma en su página 36: “Voici quelques extraits des “STATUS ET REGLEMENTS GÉNÉRAL DE FRANCE”, datés de 19 Mars 1784: “Art. 28 - Toutes les formules différentes et multipliées seront classées et rangées suivant le grande dont elles dépendent. Chaque Grade ainsi classé será connu sous la dénomination d’Ordre.” “Art. 29 - Le Grand Chapitre Général renfermera toutes les connaissances em cinq Ordres.........(siguiendo la explicación de cada Orden correspondiendo a los Grados Del 4 al 7 siendo este último El Caballero Rosacruz) ......” “Le Cinquième Ordre comprendra tous les grades physiques et méta-physiques et tous les systémes, particulièrement ceux adoptés par des associations maçonniques em vigueur”. Este Quinto Orden además de constituir una Academia o Conservatorio de diferentes grados y rituales al uso, siguiendo sus Reglamentos, se nos aparece, como lo afirma la obra referenciada, un Grado administrativo a comparar con los "Grados Blancos" del REAA. Históricamente, además, encontramos em las páginas 56/57 del “Tuileur général de la francmaçonnerie, J. M. Ragon, Paris, Collignon , de 1861”: “Rite Français: “Kadosch, parfait initié - Grade philosophique, 5e. et dernier degré du Rite Français, dit aussi GRANDE ÉLU, CHEVALIER DE L’AIGLE BLANC ET NOIR - remplaçant le 30e. degré templier du Rite Écossais.” La obra prosigue con El Cuadro, El Cubridor del Grado, la descripción de lãs Cámaras, etc. Semejante referencia Bibliográfica en la práctica de un Grado 8º dentro del Rito Moderno la vemos en Enciclopedia Masónica de la Editorial Kier, de México, en la página 808: En la parte superior de la página: “RITO FRANCÉS O MODERNO” y después, en la inferior: “8º Y ÚLTIMO DEL RITO FRANCES” ”KADOSH PERFECTO INICIADO” “GRADO FILOSÓFICO”, siguiendo con los datos sobre el grado y su Cubridor. “Vemos que el Supremo Conselho do Rito Moderno, aún pudiendo hacerlo legítimamente, no invento cosa alguna, basándose en usos debidamente documentados en la historia y práctica de nuestro Rito. Tan solo se modificó el término Kadosh (sin c) para Kadosh-Filosófico - Caballero del Águila Blanca y Negra- Inspectores del Rito - para el Grado 8, asentados en los Grandes Consejos Estatales. Por último, considerando la necesidad administrativa del Poder Central en la federación, se instituyó el Grado 9 Caballero de la Sabiduría- Gran Inspector del Rito del que hay indicios que hubo un tiempo en el que en Portugal llegó a funcionar, para los Grandes Inspectores del Rito, agrupados en el Supremo Conselho do Rito Moderno, que tiene carácter nacional.
Pocos autores pueden transmitir la excelencia de sus
estudios, reflexiones e investigaciones en un campo del saber, arte o
conocimiento. Patrick Négrier se supera a sí mismo en esta ingente obra que
resulta una continuación lógica de su anterior libro masónico L'Essence de
la Franc-maçonnerie à travers ses textes fondateurs 1356-1751.
En el plano personal, este amigo, filósofo y masonólogo referencial, siempre me ha cautivado por su generosidad en la transmisión de sus conocimientos, su accesibilidad y humanismo sin par, en equilibrio justo entre prédica y práctica de su cualidad masónica para conmigo. Colecciono como material de estudio las innumerables consultas epistolares que, cual “Clases Magistrales”, me han dado luces de espléndido fulgor desde la fuente y el origen de la Orden, hasta su desarrollo y objeto de su práctica.
De una manera también generosa, documentada, reflexiva y
amplia, Patrick Négrier aborda en su último libro La Pensée Maçonnique 1370 –1884 (Éditions NUMÉRILIVRE) el pensamiento masónico desde los Antiguos Deberes
cuya historia podemos iniciarla en la Logia de York de las que conservamos las “Ordenanzas
de la catedral de York” que datan de 1370, hasta la masonería moderna aparecida
poco antes del 1630 y donde el Mason Word escocés será trascendental a tal
efecto, dado que se inserirá con la creación de la Gran Logia de Londres y fluirá
evolutivamente, llevándonos Patrick Négrier hasta el paralelismo de la
Declaración de Principios del Gran Oriente de Francia de 1884 en una brillante
comparativa en defensa de la laicidad y el librepensamiento.
El autor, en este amplio recorrido, disecciona magistralmente aspectos filosóficos, religiosos, rituales, históricos y sociológicos, así como simbólicos, en una catarata de valores pedagógicos que me han dejado ciertamente impresionado. El lector encontrará también una extensa referencia bibliográfica utilizada, entre las que me honra emocionadamente que aparezcan dos de mis obras referenciadas: Palabra de Masón y En Oro y Azur (esta última consagrada al Rito Francés o Moderno).
Es de remarcar los capítulos dedicados al análisis biográfico y la visión teológica de un personaje clave en la francmasonería como es James Anderson que contrariamente a lo que se piensa, no es coincidente con el abordaje latitudinario contenido en las Constituciones de 1723 y 1738 que obedecían a un sentir de los miembros próximos a la filosofía deísta y al uso del método geométrico de la que se sustentaba la religión natural práctica permitiendo una tolerancia en la admisión de su membresía fundamentada en la otro-praxis moral. El otro capítulo ciertamente exquisito es el referido a las “virtudes intelectuales y ejercicios espirituales”, donde estos ejercicios espirituales que contienen una tarea simbólica, ética y metafísica, son de tipo práctico y psíquico para que, mediante los mismos, cada uno adquiera una “iluminación” que dé acceso a la revelación natural, que es lo que en definitiva interesa al masón. Estos ejercicios son accesibles a todos sin excepción y requiere simplemente de su práctica e implicación personal en llevarlos a cabo.
En resumen: un libro denso, pero imprescindible, y que se encuentra entre la mejor bibliografía que he leído hasta el día de hoy.
Muchas gracias por tus luces, Patrick.
Cuando revisamos las primigenias divulgaciones y rituales, e incluso compendios posteriores de ya bien entrado el Siglo XVIII, aparece ante nuestros ojos la cita de un lugar sagrado, bendecido y ciertamente misterioso donde se expresa que se halla ubicada la Logia: este lugar es el Valle de Josafat mencionado en los pasajes bíblicos del libro de Joel (Jl 3.2 y 12). Este “valle de bendiciones” e incluso “lugar del juicio de Yahveh, precisa de una precisa técnica hermenéutica que aporte una comprensible relación con la exégesis bíblica que será proyectada en los materiales masónicos primigenios.
A tal efecto, recurro a la sapiencia del masonólogo, filósofo y amigo, Patrick Négrier, expuesta en su ingente obra y a mis conversaciones con él, quien siempre me da la pista a seguir para encontrar respuesta a mis interrogaciones.
Para ello vamos a ubicarnos en el material del Graham y la genealogía del Mot de Maçon de 1726: el Graham es un ritual de la Palabra de Masón pero que contiene algunos materiales de los Antiguos Deberes como lo hacía también el Dumfries nº4 de 1710, si bien mientras el Dumfries yuxtaponía ambas tradiciones rituales haciendo seguir a una versión de los Antiguos Deberes una versión del Mason Word, el Graham hace inserir completamente los elementos del Mot de Maçon en la trama misma de una versión de los Antiguos Deberes, evocando el toque de maestro de los “cinco puntos” y la palabra de Maestro “Marrow in this Bone” (materiales del Mason Word) en el sujeto de Noé (figura de los Antiguos Deberes).
Para explicar la inserción de los materiales del Mason Word en una trama de los Antiguos Deberes, o la aceptación en Logia de personas ajenas al oficio, así como otras especificidades también de gran importancia, deberíamos dedicar un análisis de los Antiguos Deberes contenida en el Graham así como de los materiales intervinientes para explicar tal hecho.
Centrándonos en este ensayo en el cometido de explicar la aparición y la hermenéutica del Valle de Josafat, hablaremos de Betsalé’el, la práctica de la aceptación y el juramento de secreto:
En tiempos de Betsalé’el, el constructor del tabernáculo del Éxodo (Ex. 31, 1-5), los dos hermanos del rey Alboyne (figura tomada de los Antiguos Deberes, pero representando alegóricamente a Moisés) “desearon ser instruidos” por Betsalé’el “en su noble ciencia”. “Él consintió con la condición de que no la revelarían el uno sin el otro para hacer una triple voz –en otro trabajo abordaré este tema y la Regla de Tres-; entonces inauguraron un juramento y les enseñó las partes teórica y práctica de la masonería […] Fue entonces cuando los masones fueron contados entre los reyes y príncipes. Finalmente, cercana la muerte de Betsalé’el deseó ser enterrado en el Valle de Josafat. Se grabó sobre él, conformemente a su mérito –lo que fue cumplido por esos dos príncipes-, y se grabó lo siguiente. “Aquí yace la flor de la masonería superior a muchos otros compañeros, hermano de un rey y de dos príncipes. Aquí yace el corazón que pudo esconder todos los secretos, aquí yace la lengua que jamás los reveló”. Este pasaje del Graham es claro: utiliza la figura de las Constituciones de 1723 sobre Betsale’el (uno de los arquitectos de los tres principales monumentos de la Biblia) para asignarle de una parte la práctica de la aceptación en logia de personas ajenas al oficio de masón (que eran frecuentemente nobles) y por otra parte el juramento de secreto característico del rito de la Palabra de Masón (podemos preguntarnos también de paso si la “flor” en cuestión no hacía referencia al acróstico TULIP (tulipán) cuyas letras eran las iniciales de los “cinco puntos del calvinismo”).
Quiero hacer notar que la práctica de la aceptación no era propia solamente a las logias practicantes del Mot de Maçon: esta se encontraba ya en las logias practicantes de los Antiguos Deberes. Y remarquemos también que el “valle de Josafat” cuyo nombre significa “YHVH juzga”, y que aparece en Joel 4, 2-12 como siendo el lugar del juicio final, se encontraba ya mencionado en el Examen d’un maçon de 1723, probablemente en relación con el juramento de secreto por el cual el masón juraba no revelar nada del rito bajo pena de padecer la pena capital el día del juicio final (compárese con el contenido del juramento de secreto en el Edinburgh de 1696). De hecho, el Graham menciona el “valle de Josaphat” en relación con el hecho que Betsale’el no reveló nada de los secretos de la masonería. Como precisión importante, debemos indicar que en el rito del Mason Word, y esto desde el Edinburgh de 1696, el secreto solamente se refería sobre los elementos del rito y no sobre la pertenencia de sus miembros a la logia, como lo confirma durante la primera mitad del Siglo XVIII la existencia de procesiones públicas de masones donde en el transcurso de las mismas estos desvelaban inevitablemente su pertenencia.
-Ensemble de tout ce qui existe sur terre, perçu par l'homme et le plus souvent en opposition avec lui, Ensemble constitué des êtres et des choses créés; pour certains cela peut-être l'univers, le cosmos, pour d’autres une autre définition nous rapprochera plus de notre ordre : « La communauté; la société des hommes vivant sur terre ». C’est l’Ensemble de tout ce qui existe, de façon réelle et concrète.
Le monde impose sa réalité et l’actualité aujourd’hui ne fait que le confirmer. Nous savons que le monde précède toute construction humaine et existe avant tout langage. Il était là avant nous, il est là, et il sera toujours là. Ainsi
Le Monde s’impose à nous alors que la réalité que nous en avions était de croire que le monde nous appartenait. Exister, c'est être au monde, La définition d’Autrui est encore plus complexe : c’est l’autre, le prochain ; c'est l'autre homme en tant que sujet moral conscient. Autrui désigne un individu, un autre humain, mais un individu indéterminé. La particularité d'autrui est qu'il désigne l'autre soi-même, l'alter ego : autrui, c'est un autre moi, qui est à la fois mon semblable, et pourtant différent de moi. Autrui est donc un autre, mais un autre n'est pas autrui. L'autre peut être un homme, un animal, Dieu, ou un objet matériel alors qu'autrui est toujours un être humain envisagé comme alter ego.
La question qui se pose alors est: comment se peut-il qu’existe un autre que moi que je découvre parmi les choses et qui pourtant, comme moi, est un ego (un sujet) ? Comment peut-il y avoir un ego qui ne soit pas mon ego, qui ne me ressemble pas. Sartre dit qu'autrui c'est « ce moi qui n'est pas moi ». ... Autrui c'est à la fois le même, une conscience comme moi ; mais c'est aussi l'autre, dont la conscience et l’intériorité sont différentes. C'est la raison pour laquelle on dit qu'autrui est un alter ego (alter = autre, ego = moi, donc un autre moi. Martine ALLOTE 4ème Ordre Souverain Chapitre Provence Méditerranée « Le Voile d’Isis »
La question est celle de l'identité et de la différence. L'ego cogitant ou sujet pensant de Descartes implique que c'est moi qui pense. Ainsi considérer qu’autrui me ressemble me permet de tenter de me transposer en imagination dans les vécus d'autrui. Il s'agit d'une expérience immédiate d'appariement dépendant de la spatialisation de mon imagination par laquelle je peux faire "comme si j'étais là-bas". Il s'agit en réalité d'une intersubjectivité qui implique que je ne suis humain que dans la mesure où je veux m'imposer à l'autre, à me faire reconnaitre par lui. C'est dans cet autre que se condense le sens de ma vie. Le Dasein de Heidegger expose que cet être-avec est une disposition constitutive de l'existence humaine.
L'homme est toujours hors de soi, la présence d'autrui précédant obligatoirement la solitude car je ne peux être seul que si autrui manque. Etre c'est donc tout d'abord écouter la voie de l'ami que chacun porte en soi L'autre est donc celui-là même qui me fonde en tant qu'être dans la mesure où l'affirmation de ma différence passe par la perception de la subjectivité de mon interprétation. L'autre n'est donc qu'une théorie dont la dimension morale est absente. Levinas précise ainsi que le visage de l'autre est l'ouverture sur l'infini qui seule peut m'ouvrir à la dimension de sujet. « Autrui en tant qu’autrui, n’est pas seulement mon alter-ego. Il est ce que je ne suis pas » dit Levinas Au même titre que moi, l’autre est une conscience qui pense le monde et qui s’interprète lui-même. Comment pourrais-je avoir accès à une intériorité, à l’intériorité d’une conscience qui n’est pas la mienne. En effet, autrui n’est pas un objet mais un sujet, une identité qui ne m’est pas donnée de manière définitive mais qui se construit, qui évolue, tout comme moi. Grace à autrui j’ouvre la perspective d’un monde à entrées multiples. En effet autrui m’offre une vision sur le monde qui n’est pas la mienne, qui est la richesse de la rencontre Autrui est insaisissable. Comment deux libertés (la sienne et la mienne) peuventelles s’entendre et ne pas se heurter l’une et l’autre dans un affrontement perpétuel ?
Hobbes nous dit que « L’homme n’est pas naturellement sociable » il n’est devenu sociable que par accident. L’état de nature était défini par un état de guerre permanent de tous contre tous « l’homme est un loup pour l’homme » Kant parle de « l’insociable sociabilité de l’homme », l’homme est tiraillé par la nécessité de s’associer à d’autres hommes (donc de participer à une vie collective) et en même temps le désir de rechercher à satisfaire son intérêt personnel (donc vivre de façon individualiste) Martine ALLOTE 4ème Ordre Souverain Chapitre Provence Méditerranée « Le Voile d’Isis » 3 Autrui est donc une menace parce qu’un rival : il est insaisissable, il est une conscience dont l’accès m’est impossible. Mais si je ne peux connaitre autrui, je dois m’entendre avec lui par-delà cette inaccessibilité : si je ne peux connaitre autrui, je dois cependant le re-connaitre Claude Levi-Strauss nous explique
- Les dispositions psychologiques naturelles font que l’on a toujours du mal à admettre ce qui est différent de nous, ce qui nous est culturellement étranger car face à l’inconnu on reste sans repère, sans point d’appui possible pour y répondre. Le premier mouvement est le rejet de ce qui ne nous est pas familier. x Cependant, il n’y a qu’une seule espèce humaine. Les civilisations ne sont que des expressions particulières d’une seule et même espèce, une seule et même humanité. x Ne pas reconnaitre l’humanité chez l’homme qui me fait face en le qualifiant de « barbare » signifie me conduire comme ce que je lui reproche d’être : ne pas reconnaitre l’humanité en l’autre : ne pas reconnaitre l’humanité en moi-même. En l’excluant de la nature humaine, je m’en exclue moi-même, c’est moi le sauvage : « en refusant l’humanité en apparaissant comme les plus sauvages ou barbares de ses représentants, on ne fait que leur emprunter une de leurs attitudes typiques. Le barbare, c’est d’abord celui qui croit en sa barbarie ».
Le contenu se dévoile dès lors avec une netteté que l’acuité du regard de l’aigle permet seule. Tous nos rituels du 1er Grade au 4ème Ordre nous demandent de chercher la vérité avec les autres. Autrui est celui qui m’accompagne dans la vie d’où cette notion de voyage que nous retrouvons au 4ème Ordre et me permet de progresser de la caverne à l’anneau d’alliance en passant par le pont. La démarche est collective, point de salut sans l’Autre dans nos rituels de Sagesse. L’Arche du 4ème Ordre au sein de laquelle se trouve le Chevalier Rose-Croix nous enseigne symboliquement que les Hommes sont rassemblés sous une seule Parole dans la Foi, l’Espérance et la Charité., cette charité qui doit nous faire « découvrir avec bonheur l’Unité de l’Humanité » Et m’occuper d’autrui et donc de l’humanité revient aussi à m’occuper de moi car j’en suis membre. D’aucun pourrait penser que s’occuper de soi passe pour de l’égoïsme, il n’en est rien, car s’occuper de soi, c’est sortir de l’ombre, c’est « essayer de se rendre visible à soimême » c’est pour le Maçon partager avec autrui ce qu’il a reçu en partage. Autrui existe dans toute sa liberté et c’est cette liberté pure et totale qui en fait une existence irréductible à la mienne, cette existence qui m’échappe et me limite dans ma propre liberté si je ne fais rien pour lui. Le devoir à l’égard d’autrui ne limite pas ma liberté, mais il la fonde en ce que ma définition d’humain, et donc de maçon, exclue la solitude. « Êtes-vous Franc Maçon » interroge le rituel. Et la réponse « Mes Frères me reconnaissent pour tel » souligne l’obligation d’appartenir à la communauté des hommes pour exister moi-même.
Je ne saurais
exister seul, sans le témoignage de l’autre. Autrui me fait progresser lorsqu’il me
pousse dans mes derniers retranchements. C’est en effet uniquement lorsqu’on se
sent assez fort soi-même pour s’ouvrir sans réticence à autrui que peut vraiment
avoir lieu la rencontre de l’autre, source d’enrichissement qui donne à la vie de
l’individu une ampleur et une profondeur plus grandes. C’est pourquoi il est certes
bon de multiplier dans la vie sociale les lieux et les occasions de rencontre ; mais
il est plus important encore de savoir se préparer soi-même à la rencontre, à
l’accueil de l’autre. Vivre avec les autres peut certes être parfois un enfer, comme
le soulignait Sartre, si chacun se sent constamment épié et jugé par l’autre ; mais
il n’est pas davantage de paradis pensable dans la solitude et l’enfermement en
soi. Ni enfer ni paradis, la vie en commun n’est pas exempte de conflits, de crises
Martine ALLOTE 4ème Ordre Souverain Chapitre Provence Méditerranée
« Le Voile d’Isis »
5
et même de drames, et la rencontre de l’autre est toujours le commencement d’une
aventure, qui, comme toutes les aventures, peut mal finir.
Toute rencontre, sans qu’on puisse le savoir d’avance, peut-être un mal ou au
contraire un bien. Mais c’est à travers l’échec, et non pas en le fuyant par avance,
qu’on peut s’affermir et devenir vraiment soi-même.
Tel le pélican se sacrifiant pour sauver ses petits je dois moi aussi m’extraire de
moi-même, de la personnalité ancienne enfermée dans mon ignorance et mon
égoïsme pour renaître à une vie meilleure. Je ne sais connaître ou plutôt
reconnaître, que ce que j’ai appris et qui constitue le fondement même de ce que
je suis et il me faut de la foi et de l’amour pour entendre qu’autrui en face de moi
est aussi un autre moi-même qui a ses propres pensées, ses propres aspirations.
Il est moi et il est Autre mais c’est un être humain en devenir comme moi-même.
Le devoir à l’égard d’autrui fonde ma liberté, il en est le garant, il m’inscrit dans
la communauté des humains dont notre fraternité est le prototype. Je dois
distinguer sans séparer, différencier sans opposer. Grâce à autrui le Monde existe,
nous sommes, moi et autrui, deux consciences qui se reconnaissent comme sujets.
Mais cette reconnaissance ne signifie pas la connaissance d’autrui en son essence.
Je le reconnais comme une conscience de soi au même titre que moi avec ses
désirs, ses projets…et dans un rapport au monde différent du mien. C’est pourquoi
autrui est l’incarnation d’une liberté dans le monde à laquelle je dois le respect.
Je dois à autrui ce qu’il se doit à lui-même : respect, amour et compréhension sans
jugement. N’oublions pas de nous en servir mes sœurs et mes frères au long de
notre vie et de nous élever contre tout ce qui porte atteinte à autrui.
C’est tout le travail du Parfait Chevalier, Chevalier Rose Croix : L’armure de la
foi, la ceinture de l’espérance et l’épée de la charité sont des outils au service de
l’humanité et du Monde.
« Le monde prend sens à partir d’autrui.
Si autrui existe pour vous, s’il est respecté dans la juste
mesure, le monde s’ouvre pour vous. »
J’ai dit TS & PM et vous tous Très Respectables et Parfaits Sœurs et Frère
Martine ALLOTE 4ème Ordre Souverain Chapitre Provence Méditerranée « Le Voile d’Isis »